"Poca interferencia del estado es tan peligrosa como mucha - porque lo primero lleva inevitablemente a lo segundo." (Harry Browne)
El Mesías dijo, "Dejad que los niños vengan a mi". Si bien la historia que contamos a continuación parece un relato bíblico, la realidad venezolana nos muestra que el general y líder socialista, el Salvador Hugo Chávez está por traer el reino de los cielos a Venezuela. Al menos eso cree. Si el reino de los cielos significa pobreza, escacez, terror y falta de libertad pues tocará ir a reservar cuarto al reino de Don Satanás. Algo de libertad ha de haber por ahí. Seguro más que en Venezuela. De regreso al relato.
Como la Patria en Venezuela también es de todos, ahora es el turno de que los niños sean de todos. El Chavito está impulsando una ley para otorgarle al estado la Patria Potestad de los niños de entre 3 a 20 años, formando un grupo denominado "Círculos Infantiles" (¿recuerdos de las juventudes hitlerianas?). Durante este tiempo, sus familias sólo podrán verlos 2 días al mes.
Funciona de la siguiente manera: el socialismo de allá no tenía qué otra libertad quitar, y se dio cuenta que aún no había destruido las familias, una de las pocas cosas que quedaban algo protegidas de las garras del estado aún. Entonces a don Huguín se le ha ocurrido quitarle a las familias sus niños. ¡Lo que hace la soltería! ¿Alguien le podría explicar al coronel cómo se hacen los niños? A ver si así deja de querer robarse los niños de los demás (como ya ha hecho su socialismo con sus bienes, libertades, comodidades, pasaportes, etc.).
Les das la mano y se te cuelgan del hombro. Una Asamblea le dio a Chávez más poder y se te llevan a los hijos. Las paradojas de no vivir en libertad. Al General también le falta mujer... ¿Serán las siguientes?